Joan eduki nagusira

zoom Iñigo Sota Heras

Iñigo Sota Heras

En su tesis doctoral, leída en la Universidad Pública de Navarra, Iñigo Sota Heras, licenciado en Comunicación, ha investigado de qué modo influye la narrativa cinematográfica a la hora de percibir nuestra verdadera identidad personal. Tomando como punto de partida tres películas de la directora norteamericana Sofia Coppola, Iñigo Sota intenta responder a la pregunta sobre quiénes somos y señala que “somos nuestras acciones: ser conscientes de lo que hacemos nos ayudará a interpretar lo que somos”.

La tesis lleva por título “La poética del yo. Estudio de la problemática identitaria a partir del cine actual”. Ha sido dirigida por los doctores Ignacio Sánchez de la Yncera y Josetxo Beriain Razquin, del Departamento de Sociología de la UPNA, y ha obtenido la calificación de sobresaliente cum laude.

¿En qué medida la constatación de la existencia por medio de los relatos contribuye a descubrir nuestra verdadera identidad personal?”, se pregunta Íñigo Sota. En su investigación, defiende que la identidad personal es algo que abarca toda la vida del individuo, que lo define de principio a fin, por lo que no puede relegarse a un segundo plano.

En su opinión, articular la identidad y descubrir quiénes somos forma parte de un proceso de narración continua de las propias aventuras y desventuras porque «solo contándonos a nosotros mismos lo que nos sucede podremos llegar a tener un hilo conductor coherente y, por tanto, un punto de partida más sólido”.

Los antihéroes de Sofia Coppola

Para llevar a cabo su investigación, el autor tomó como punto de partida tres películas de la directora norteamericana Sofia Coppola, autora de cintas como Lost in translation o María Antonieta. Íñigo Sota se apoya en las cualidades más expresivas de su modo de narrar (el uso de los silencios o la recurrencia al minimalismo a la hora de dejar abiertas las tramas) para proponer un modelo concreto de articular el yo. “Sofia Coppola es fiel ejemplo de lo que significa profundizar en la psicología humana a través de los héroes mundanos, cotidianos, esos que podríamos ser nosotros mismos. Hay en sus vidas rotas y anhelantes un deseo de salir de un mundo para vivir en el suyo propio”.

Además de tomar como base teórica de sus reflexiones las ideas de sociólogos como Charles Taylor, Paul Ricoeur o Daniel Bell, Iñigo Sota defiende que quizá, en nuestro actual escenario sociocultural, no sea mera casualidad el auge de los antihéroes (protagonistas con marcados conflictos interiores, entregados al presente, deseosos de tener una vida más plena pero cobardes). Según explica, «el marco existencial ha cambiado y la clave está en analizar que lo que antes se veía como modo de conducta colectiva y deseable hoy ha quedado obsoleto gracias al imperio del yo. No resulta extraño, por tanto, que el antihéroe haya sido y sea todavía el paradigma preferido por literatos y guionistas a la hora de mostrar esas conductas y aventuras enraizadas en nuestra era. El antihéroe cotidiano, ese que lucha por sobrevivir en la gran ciudad y mantener una vida responsable, pero que falla continuamente en el intento, es la muestra más expresiva de que el ser humano, hoy en día, camina en un sentido nuevo y diferente, que el sueño de perfección ha acabado».

Partiendo del análisis de los personajes de Sofia Coppola y de una puesta en valor de los relatos de ficción como respuesta a los interrogantes sobre la vida, Íñigo Sota ha propuesto en su tesis un modelo de análisis de lo que somos, de lo que nos hace humanos, de lo que, en definitiva, puede darnos la clave para vivir mejor: descubrir poco a poco quiénes somos.

Licenciado en Comunicación Audiovisual por la Universidad de Navarra (2006) y Máster en Periodismo Digital por la Universidad Carlos III de Madrid (2009), Iñigo Sota fue galardonado en 2010 con el Premio Francisco Ynduráin para Jóvenes Escritores por su trayectoria literaria. Ha escrito novela, teatro y guiones cinematográficos y es un autor activo en redes sociales.