Joan eduki nagusira

Tanto estudiantes como empresas se muestran altamente satisfechos por las prácticas formativas que se realizan a través de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Agrónomos (ETSIA) de la Universidad Pública de Navarra, con ayuda de la Fundación Universidad Sociedad. Estas prácticas están favoreciendo además claramente la inserción en el mercado laboral.

Estas son las principales conclusiones del estudio “Medición del grado de satisfacción de estudiantes e inserción laboral en Ingeniería Agronómica. Experiencia en la ETSIA de la UPNA”, elaborado por M. Sánchez, A. Enrique, P. Yanguas, J. González, J. Mate, R. Barrena y A. Arana, y que ha sido presentado esta mañana en las IX Jornadas sobre Docencia e Investigación en Ingeniería Agroforestal, que se celebran entre los días 12 y 15 de septiembre en la Escuela de Ingeniería Agraria de la Universidad de León, con la asistencia de escuelas de agrónomos de toda España.

El estudio analiza los resultados de diferentes encuestas de satisfacción realizadas a estudiantes y empleadores sobre las funciones desempeñadas, la duración de la práctica, el aprovechamiento de cara al futuro empleo y la tutorización recibida. Los datos provienen de la base de datos de empresas que la ETSIA está elaborando en aplicación de su Sistema de Garantía de la Calidad.


Una relación estable con 116 empresas


Según dichos datos, la ETSIA ha mantenido en los últimos cinco años una relación estable con 116 empresas, un 90% de las cuales se ubican en un entrono geográfico próximo. También se incluyen empresas colaboradoras para realizar prácticas en entornos internacionales, que van creciendo aunque la ETSIA se propone que el incremento sea mayor.

Sobre esta muestra de empresas se han firmado un total de 302 convenios, una media de tres por empresa. Esta colaboración se traduce en dos tipos de relació; por un lado, puede ser una práctica temporal para atender necesidades habituales de la empresa, y por otro lado, puede tratarse de la realización de Proyectos Fin de Carrera en empresas.

De las encuestas realizadas se desprende que tanto estudiantes como empresas manifiestan elevados valores en todas las mediciones de satisfacción. También se deduce que las prácticas favorecen claramente una entrada más exitosa en la actividad laboral posterior. Los 302 convenios suscritos con empresas han dado lugar a 88 contratos laborales, bien en la propia empresa donde se realizó la actividad formativa (74%) o bien en otra empresa (26%) pero relacionada con la práctica realizada.

Estas cifras de inserción –precisa el estudio- se amplían posteriormente, ya que hay casos de estudiantes que declinan las ofertas de empleo por interés en continuar estudios de mayor nivel (Ingeniería Superior o másteres).