Joan eduki nagusira

El Consejo Social de la Universidad Pública de Navarra (UPNA) ha iniciado un proceso de reflexión sobre el presente y el futuro de las relaciones de la institución académica con la sociedad. Este proceso obedece a que es el órgano colegiado de participación de esta última en la Universidad y actúa como elemento de vínculo entre entidades y ciudadanía de la Comunidad Foral, por un lado, y la institución académica, por otro.

zoom De izq. a dcha.: Ignacio Cabeza (presidente de la Cámara de Comptos), Javier Vidorreta (presidente del Consejo Social), Ramón Gonzalo (rector de la UPNA), Patricia Fanlo (consejera) y Carles Ramió (catedrático Universidad Pompeu Fabra).

De izq. a dcha.: Ignacio Cabeza (presidente de la Cámara de Comptos), Javier Vidorreta (presidente del Consejo Social), Ramón Gonzalo (rector de la UPNA), Patricia Fanlo (consejera) y Carles Ramió (catedrático Universidad Pompeu Fabra).

En este sentido, ha organizado tres sesiones a lo largo de estos próximos meses para sus 21 integrantes, la primera de las cuales ha estado dedicada a reflexionar sobre la misión del Consejo Social. Para ello, ha contado con dos ponentes destacados: Ignacio Cabeza del Salvador, presidente de la Cámara de Comptos; y Carles Ramió Matas, catedrático de Ciencia Política y de la Administración en la Universidad Pompeu Fabra (Barcelona). El primero ha analizado la tarea del Consejo Social en el ámbito económico; y el segundo se ha centrado en la aportación de la universidad al desarrollo de la sociedad.

En la apertura del acto, Patricia Fanlo Mateo, consejera de Universidad, Innovación y Transformación Digital del Gobierno de Navarra, ha enfatizado el compromiso del Ejecutivo foral para “impulsar el conocimiento compartido, la innovación y la ciencia como pilares fundamentales para la transformación social”. Asimismo, ha resaltado la importancia del Consejo Social de la UPNA como “un órgano vital para fortalecer los lazos entre la Universidad, la sociedad y el sector empresarial”. “La colaboración entre el ámbito académico y empresarial es esencial para adaptar la formación a las necesidades del mercado laboral y promover la innovación”, ha señalado.

Por su parte, el empresario Javier Vidorreta Salillas, presidente del Consejo Social, ha indicado que “el ritmo de cambio de la sociedad es acelerado, y las transformaciones tecnológicas también son profundas y vertiginosas”. “Y en todo esto –ha añadido—, la Universidad juega un papel esencial. Por ello, es muy oportuno que desde los órganos de gobierno de las instituciones, y en ello está el Consejo Social, nos paremos a pensar y reflexionar sobre el futuro de las relaciones de la Universidad con la sociedad”.

Un elemento de interrelación

La Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU) define al consejo social como “el órgano de participación y representación de la sociedad, un espacio de colaboración y rendición de cuentas en el que se interrelacionan con la universidad las instituciones, las organizaciones sociales y el tejido productivo”. Respecto a sus funciones, destacan elaborar un plan trienal para fomentar la cooperación entre la universidad, sus antiguos alumnos y su entorno cultural, profesional, científico, empresarial, social y territorial; promover la captación de recursos económicos para financiar la universidad; informar la oferta de titulaciones oficiales y de formación permanente; supervisar las actividades de carácter económico de la universidad y aprobar el presupuesto de la institución universitaria y de las entidades que de ella dependan; y aprobar, a propuesta del Consejo de Gobierno, el Plan Plurianual de Financiación de la universidad.

En este marco, el Consejo Social de la UPNA , ha desarrollado diversas iniciativas que complementan sus funciones básicas, como la puesta en marcha de su Foro Social y Empresarial, un entorno para promover la participación y el asesoramiento social a esta entidad, y la creación de ochos clubes profesionales para impulsar, junto a los responsables académicos de la Universidad, una oferta de formación permanente dirigida a profesionales en ejercicio y adaptada a sus necesidades.

En concreto, se trata del CEO Club, compuesto por máximos responsables de empresas navarras; el Club Financiero, integrado por directivas y directivos de entidades financieras radicadas en la Comunidad Foral; el Club de Emprendedores, donde están representadas algunas de las emprendedoras y algunos de los emprendedores más destacados de la Comunidad Foral; el Club de Directores y Directoras de Centros de Secundaria, conformado por una veintena de representantes de estas instituciones; el CEO Club de Entidades Sociales, un grupo estable de personas con responsabilidades en la dirección y gestión de entidades solidarias y empresas de economía social; el Club de Directores de Recursos Humanos, que reúne a responsables de esta materia en las principales firmas navarras; el Club de Directores de I+D+i, que aglutina a personas directivas en tareas de investigación, desarrollo e innovación; y el Club Cultural, al que pertenecen una treintena de entidades culturales.