Joan eduki nagusira

El Instituto Smart Cities (ISC) de la Universidad Pública de Navarra y la empresa SiG Coop celebraron ayer martes, 27 de septiembre, la jornada “Almacenamiento e hibridación, a examen”, con el objetivo de poner en común el conocimiento académico y la experiencia de distintas empresas que trabajan en el ámbito de las energías renovables. Según se puso de manifiesto en el transcurso de la sesión, el repunte del precio del litio, provocado por la alta demanda de las renovables y la automoción, obliga a las empresas a explorar materiales alternativos para las baterías.

zoom Xabier Barón, director de Operaciones en SiG Coop, junto a Mikel Irujo y Francisco Javier Arregui en la apertura de la jornada (Foto Víctor Ruiz).

Xabier Barón, director de Operaciones en SiG Coop, junto a Mikel Irujo y Francisco Javier Arregui en la apertura de la jornada (Foto Víctor Ruiz).

La jornada, con participación de responsables de empresas y profesorado universitario, fue inaugurada por el consejero de Desarrollo Económico y Empresarial del Gobierno de Navarra, Mikel Irujo, y por el vicerrector de Investigación de la UPNA, Francisco Javier Arregui.

El director de Operaciones de SiG Coop, Xabier Barón, explicó en primer lugar los objetivos de la jornada, que reunió a unos 250 profesionales presencialmente y por streaming: “Los que procedemos del ámbito de la academia sabemos que es fundamental romper las barreras entre el conocimiento de las aulas y el de las empresas. Por eso, quiero destacar la valentía que han tenido las firmas participantes al acercarse y responder las preguntas de sus colegas de profesión, así como las de los estudiantes que participan de esta jornada”.

En opinión de los expertos, desplegar la verdadera potencia de las renovables pasa por dos vías: unir distintas tecnologías en una misma instalación con un solo punto de conexión a la red, lo que permitiría, por ejemplo, compensar la falta de sol con la capacidad para producir energía a partir del viento; y, cuando abunden dichos recursos naturales, tener la posibilidad de almacenar la energía producida de más.

En ese contexto se ofrecieron algunos datos relacionados con el creciente auge de las energías renovables. Así, Red Eléctrica Española (REE) sumó en 2021 más de 4.000 nuevos megavatios (MW) verdes hasta alcanzar 63.896 MW de capacidad, un 56,6 % de la capacidad de producción nacional (112.846 MW). Sin embargo —se apuntó—, para alcanzar su plena integración, el sector debe consolidar este crecimiento por medio de una mayor flexibilidad técnica que le permita ofrecer sus servicios con independencia de la variabilidad del clima.

Almacenamiento y alternativas

En la primera parte de la sesión se expuso la situación actual del sector y se formularon preguntas en torno al almacenamiento y la hibridación. En concreto, se centraron en el reto que supone la estandarización de los nombres que los fabricantes dan tanto a los componentes como a sus estados operativos. “Las firmas hemos puesto muchos esfuerzos en la innovación de las tecnologías y en su mejora continua, pero no nos hemos preocupado de ponernos de acuerdo en nombrar a las cosas por su nombre”, valoró Juan Carlos Pérez, head of Control Systems and Grid Integration en Iberdrola Renovables. Al mismo tiempo, destacaron también asuntos referentes a la ciberseguridad de las plantas y a las alternativas a las baterías de litio.

En el segundo bloque del evento se subrayó la necesidad de explorar alternativas al litio para la fabricación de las baterías, ya que su precio se ha incrementado exponencialmente en el último año debido a la alta demanda que tienen tanto las propias renovables como el sector de la automoción. Así mismo, los expertos expusieron distintos casos prácticos de instalaciones de almacenamiento que manejan en la actualidad.