Joan eduki nagusira

zoom Estudiantes implicados en la iniciativa, con los materiales desarrollados. De izq. a dcha.: Raquel Martínez (estudiante de Ingeniería en Diseño Mecánico), Gonzalo Iranzu (estudiante de Ingeniería en Diseño Mecánico), Adrián Jiménez (estudiante de Ingeniería en Diseño Mecánico), Leire Tirapu (estudiante de Fisioterapia), Pedro Jesús Muerza (estudiante de Ingeniería en Diseño Mecánico), Alfredo Iranzu (estudiante de Ingeniería en Diseño Mecánico), Eider Eizaguirre (estudiante de Fisioterapia), Ana Ramos (estudiante de Enfermería) y Adriana Sagüés (estudiante de Enfermería). Falta: Judit Ostiz (estudiante de Ingeniería en Diseño Mecánico).

Estudiantes implicados en la iniciativa, con los materiales desarrollados. De izq. a dcha.: Raquel Martínez (estudiante de Ingeniería en Diseño Mecánico), Gonzalo Iranzu (estudiante de Ingeniería en Diseño Mecánico), Adrián Jiménez (estudiante de Ingeniería en Diseño Mecánico), Leire Tirapu (estudiante de Fisioterapia), Pedro Jesús Muerza (estudiante de Ingeniería en Diseño Mecánico), Alfredo Iranzu (estudiante de Ingeniería en Diseño Mecánico), Eider Eizaguirre (estudiante de Fisioterapia), Ana Ramos (estudiante de Enfermería) y Adriana Sagüés (estudiante de Enfermería). Falta: Judit Ostiz (estudiante de Ingeniería en Diseño Mecánico).

La Federación Navarra de Actividades Subacuáticas (FNDAS) celebró ayer, miércoles 13 de junio, en el campus de Tudela de la Universidad Pública de Navarra (UPNA) un homenaje a las personas que han participado este curso 2017-2018 en un proyecto de buceo adaptado a personas con discapacidad, por el que siete estudiantes de dicha institución académica han elaborado materiales adaptados para la realización de ejercicios de entrenamiento, bajo la dirección de dos profesores y el voluntariado de otras tres alumnas.

En el evento, estuvieron presentes Miguel Carabantes Rodríguez, presidente de la Federación Navarra de Actividades Subacuáticas; Roberto Aguado Jiménez y Ana Insausti Serrano, decano y vicedecana de la Facultad de Ciencias de la Salud de la UPNA; Ignacio Arana Navarro, subdirector de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales y de Telecomunicaciones (ETSIIT) de la UPNA; Tomás Ballesteros Egüés, profesor del grado en Ingeniería en Diseño Mecánico del campus de Tudela e impulsor de la iniciativa; Raúl Maiza González, alcalde del Ayuntamiento de Berriozar, en cuya piscina cubierta se probaron los materiales a lo largo de varios sábados del curso académico; y Óscar Lasaosa Lizarazu, gerente de las instalaciones deportivas de esta última localidad de la comarca de Pamplona.

Además, acudieron representantes de las seis asociaciones de personas con diversidad funcional de la Comunidad Foral que han entrenado con los útiles diseñados por el alumnado. Se trata de ADEMNA (Asociación de Esclerosis Múltiple de Navarra), ANA (Asociación Navarra de Autismo), Anfas, Asociación Ibili, el Centro Infanta Elena de Cordovilla y el Colegio de Educación Especial El Molino de Pamplona.

zoom Estudiantes, profesorado, monitores de la Federación Navarra de Actividades Subacuáticas y autoridades participantes en el homenaje, celebrado en el campus de la UPNA en Tudela. Entre ellos, los dos profesores implicados en la iniciativa: Tomás Ballesteros, profesor de Ingeniería en Diseño Mecánico (de pie, 2.º por la izquierda) y Ana Insausti, profesora de Fisioterapia (de pie, 5.ª por la derecha).

Estudiantes, profesorado, monitores de la Federación Navarra de Actividades Subacuáticas y autoridades participantes en el homenaje, celebrado en el campus de la UPNA en Tudela. Entre ellos, los dos profesores implicados en la iniciativa: Tomás Ballesteros, profesor de Ingeniería en Diseño Mecánico (de pie, 2.º por la izquierda) y Ana Insausti, profesora de Fisioterapia (de pie, 5.ª por la derecha).

De los siete estudiantes vinculados a este proyecto, que cursan sus estudios en el campus de Tudela, seis de ellos (Alfredo Iranzu Balbuena, Gonzalo Iranzu Balbuena, Adrián Jiménez Loygorri, Raquel Martínez Hoyos, Pedro Jesús Muerza Arto y Judit Ostiz Poyo) están matriculados en el grado en Ingeniería en Diseño Mecánico y la séptima (Leire Tirapu Albisua), en el de Fisioterapia. A ellos se suman tres alumnas voluntarias: dos de Enfermería del campus de Pamplona (Ana Ramos Ruiz y Adriana Sagüés Curini) y una tercera de Fisioterapia (Eider Eizaguirre Guillorme).

Romper barreras de movilidad

“La práctica de actividades subacuáticas permite a personas con discapacidad disfrutar de un medio, la piscina, donde pueden romper barreras de movilidad que, en tierra, le son difíciles de alcanzar —explica Tomás Ballesteros, profesor del Departamento de Ingeniería y responsable de la asignatura Ergonomía, que imparte a estudiantes de 4.º curso de Ingeniería en Diseño Mecánico—. Estudiantes de la Facultad de Ciencias de la Salud —Enfermería, en Pamplona, y Fisioterapia, en Tudela—, con los de Ingeniería de Diseño Mecánico, han colaborado en el desarrollo de diferente material destinado a realizar ejercicios que sirvieran para un entrenamiento tanto físico como psíquico”.

Este proyecto ha partido del trabajo fin de grado que la estudiante de Fisioterapia Leire Tirapu ha realizado sobre “Hidroterapia y buceo adaptado en pacientes con hemiplejia”, bajo la dirección de Ana Insausti, profesora del Departamento de Ciencias de la Salud. Una vez identificadas dolencias y soluciones, seis estudiantes de Ingeniería en Diseño Mecánico han diseñado y fabricado los materiales necesarios para ejercitarse. Han partido, para ello, de objetos ya existentes, a los que han adaptado las innovaciones desarrolladas en clase de Ergonomía. “La única limitación consistía en que partieran de elementos baratos”, apunta Tomás Ballesteros. Así, han modificado pelotas para que tengan flotabilidad casi neutra y, a través de unos platos con imanes, se puedan poner a distintas alturas, modificado para ello un cono de ejercicios de agilidad, o un panel subacuático (a modo de puzle).

Prácticas en Berriozar

El siguiente paso del proyecto ha consistido en que personas con diversidad funcional probaran los citados materiales. Así ha ocurrido en la piscina cubierta del Polideportivo de Berriozar, instalación donde entrena la Federación Navarra de Actividades Subacuáticas. Allí han acudido 32 integrantes de las seis asociaciones participantes antes citadas. Durante las sesiones, han colaborado como voluntarias dos estudiantes de Enfermería.

La Federación Española de Actividades Subacuáticas ya ha mostrado su interés en elaborar manuales sobre la utilización de los materiales diseñados por estudiantes de la UPNA en Tudela con el fin de que puedan ser aprovechados por diferentes organizaciones que trabajan con personas con diversidad funcional.