Las organizaciones no gubernamentales Teléfono de la Esperanza, Auxiliares del Buen Pastor-Villa Teresita y Fundación Gizakia-Herritar París 365 han resultado destinatarias de las tres ayudas a personas necesitadas con motivo de la COVID-19 convocadas por la Fundación Jaime Brunet de la Universidad Pública de Navarra (UPNA).
La UPNA.
Las dotaciones económicas, de 10.000 euros cada una, estaban destinadas a entidades que desempeñasen su labor humanitaria en Navarra al menos, desde hace dos años. Su finalidad, en consonancia con la labor en la defensa y protección de los Derechos Humanos de la Fundación Jaime Brunet, era la de contribuir a mitigar la grave situación socio-económica presente, originada por la pandemia del coronavirus.
La Fundación Jaime Brunet es una fundación cultural privada, de interés social y carácter permanente, cuyos fines son el fomento del respeto a la dignidad humana, a las libertades fundamentales y a los derechos humanos, así como la erradicación de situaciones y tratos inhumanos o degradantes.
Labor de las entidades y destino de las ayudas
La entidad de iniciativa social Asociación Internacional del Teléfono de la Esperanza (ASITES), dedicada a la promoción de la salud emocional y especializada en la atención de personas en situación de crisis individual, familiar o psicosocial, empleará la ayuda en la mejora de sus instalaciones en Navarra y en las actividades relacionadas con su 50 aniversario, todo ello destinado a continuar con su labor, que se ha visto incrementada con motivo de la crisis del coronavirus.
Por su parte, Auxiliares del Buen Pastor-Villa Teresita es una asociación sin ánimo de lucro y de ideario cristiano, de ámbito nacional, que desde una perspectiva de género y derechos humanos dirige su acción a la promoción, desarrollo y reinserción de mujeres en situación de exclusión social, prostitución y víctimas de trata con fines de explotación sexual. La pandemia ha hecho que la labor de esta ONG se triplique, y la ayuda económica se destinará a continuar su labor de atención a mujeres en estas situaciones y de ayuda a la cobertura de sus necesidades básicas.
En tercer lugar, la Fundación Gizakia Herritar-Paris 365, entidad que trabaja en el ámbito de la justicia social y los derechos humanos cuyo fin es el de contribuir a la plena inclusión social de las personas y familias en riesgo o situación de exclusión social. En concreto, el comedor es un recurso de emergencia para facilitar una alimentación adecuada a personas en situación de pobreza que no pueden acceder a una alimentación adecuada. La donación ayudará a financiar sus actividades, que también incluyen otros servicios de alimentación (servicios de sopa caliente y cestas básicas) y, en definitiva, la reducción de desigualdades, que se han visto acrecentadas por la crisis producida por la COVID-19.
Jaime Brunet Romero
La fundación toma el nombre de Jaime Brunet Romero (Bayona, Francia, 1926-San Sebastián, 1992), que se licenció en Derecho por la Universidad de Valladolid. Al no tener descendencia directa, y movido por sus sentimientos que le rebelaban contra las actuaciones injustas, decidió legar su fortuna para crear a su fallecimiento la fundación que, con su nombre, se dedicara a divulgar los derechos humanos y a premiar a quienes, por su trabajo en defensa de ellos, se hicieran merecedores de este reconocimiento. De este modo, se creó la Fundación Jaime Brunet Romero, con residencia en la UPNA, según su voluntad testamentaria.
La Fundación Jaime Brunet es una fundación cultural privada, de interés social y carácter permanente, cuyos fines son el fomento del respeto a la dignidad humana, a las libertades fundamentales y a los derechos humanos, así como la erradicación de situaciones y tratos inhumanos o degradantes.
Anualmente, la fundación convoca tres premios: El Premio Internacional Jaime Brunet a la promoción de los Derechos Humanos, para promover y difundir la defensa de los derechos humanos y contribuir a la erradicación de las situaciones o tratos inhumanos o degradantes, vulneradores de los derechos inherentes a la dignidad de la persona; el Premio Tesis Doctorales Jaime Brunet, que premia tesis cuyo contenido básico tenga una relación directa con los derechos humanos y su defensa y promoción; y el Premio Universitario Jaime Brunet, para distinguir, cada año, el trabajo de un estudiante universitario (trabajos de fin de grado o máster) que aborde también las citadas temáticas.