Alicia Garrón Rodríguez, graduada en Enfermería por la Universidad Pública de Navarra en 2019, obtuvo la plaza 69 entre 11.981 aspirantes en la última convocatoria del examen EIR (Enfermero Interno Residente) para 1.463 plazas. De las plazas ofertadas, Alicia Garrón ha optado por formarse como matrona y, a partir de septiembre, se incorporará al Complejo Hospitalario de Navarra para realizar la especialidad de Enfermería Obstétrico-Ginecológica.
El EIR es un examen, de carácter estatal, sobre contenidos de toda la carrera de Enfermería. Se realiza todos los años en las diferentes comunidades autónomas y permite que las personas graduadas en Enfermería puedan acceder a la formación de una de las especialidades desarrolladas actualmente. Estas especialidades se realizan mediante el sistema de residencia, a través de un contrato en formación remunerado.
Para preparar el examen, Alicia Garrón se inscribió en una academia en modalidad de curso presencial. “Empecé a acudir a las clases en abril, pero como me coincidió con el final del Grado en Enfermería, realmente no empecé a estudiar hasta finales de mayo o principios de junio de 2019”. Según explica, “seguí los consejos de la academia y durante ese verano lo que hice fue familiarizarme con los apuntes de los diferentes temas, a base de leer y releer. A partir de septiembre empecé la fase intensiva de estudio y, posteriormente, hice la tercera fase de repaso final”.
El examen EIR, tipo test, tuvo lugar a finales de enero de este año y constó de 185 preguntas que los aspirantes debían responder en un tiempo máximo de cuatro horas. “Pienso que la clave fue volver a los apuntes una y otra vez, para consolidar la información, además de realizar test y simulacros de examen”, indica esta enfermera.
Matrona en el CHN
Alicia Garrón ha escogido la especialidad de Enfermería Obstétrico-Ginecológica (matrona) en el Complejo Hospitalario de Navarra, al que deberá incorporarse a finales de septiembre y donde permanecerá dos años como enfermera interna residente.
La matrona es el profesional sanitario que proporciona una atención integral a la salud sexual, reproductiva y maternal de la mujer, en su facetas preventiva, de promoción y de atención y recuperación de la salud. Incluye la atención a la madre, en el diagnóstico, control y asistencia del embarazo, parto y puerperio normal y la atención al hijo recién nacido sano, hasta el 28 día de vida.
Su ámbito de actuación abarca tanto la Atención Primaria (centros de salud, comunidad, familia y domicilio) como la Atención Especializada (hospital u otros dispositivos dependientes del mismo). Así mismo, pueden ejercer su profesión en el sector público, en el privado, por cuenta ajena y por cuenta propia.