Oskar González Mendia, profesor e investigador, ayer martes, durante su intervención en ciclo de la UPNA celebrado en el Museo de Navarra.
La aplicación de técnicas científicas en cuadros y esculturas, como los rayos X, la luz infrarroja o la ultravioleta, permite “comprender mejor la historia del arte”. Así lo expresó ayer, martes 11 de diciembre, el investigador y divulgador Oskar González Mendia en la primera de las tres conferencias del ciclo “Arte, Ciencia y Tecnología: miradas diferentes a una misma realidad”. La charla, organizada por la Universidad Pública de Navarra (UPNA) en colaboración con la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT)-Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, tuvo lugar en el Museo de Navarra. Allí continúa hoy, miércoles día 12, el ciclo con la divulgadora Deborah García Bello y su charla “La ciencia de mirar el arte contemporáneo” y concluirá mañana, jueves día 13, con la intervención del cirujano maxilofacial Florencio Monje Gil, que tratará sobre “El rostro enfermo. Un viaje por la pintura universal para entender las enfermedades de la cara”. Ambas conferencias tienen entrada libre y comienzan a las 19.30 horas.
Oskar González Mendia, doctor en Química Analítica y profesor e investigador de la Universidad de País Vasco (UPV-EHU), describió al público asistente algunas de las tecnologías empleadas para descubrir los secretos de las obras de arte: los rayos X, distintos tipos de luz (infrarroja, ultravioleta y rasante) y la fluorescencia de rayos X, entre otras. “Son técnicas no destructivas, que no perjudican las obras de arte —afirmó Oskar González Mendia, cuya conferencia tituló “Viendo el arte con una mirada científica”—. Con estas tecnologías, se pueden analizar las distintas capas de un cuadro: el barniz, la pintura… hasta llegar al fondo, por ejemplo, el dibujo si lo hay. Gracias a la información obtenida, se puede conocer tanto qué idea original tenía el pintor, que luego podía cambiar pintando encima otros motivos, como descubrir el tipo de pincelada. También sirve para detectar falsificaciones”.
Ejemplo de la aplicación de rayos X en una obra de arte, en este caso, de Van Gogh. A la izquierda, “Naturaleza muerta con flores de prado y rosas” y, a su lado, los torsos desnudos de dos luchadores, obra descubierta debajo de la anterior.
Este divulgador sobre el binomio ciencia y arte a través de su blog KimikArte y de su cuenta de Twitter @Oskar_KimikArte señaló que estos estudios con técnicas científicas se emplean antes de realizar una intervención en una obra de arte, como una restauración, o en obras especiales. “Por ejemplo, el Rembrandt Research Project trabaja desde finales de la década de los 60 en identificar obras del pintor holandés”, añadió.
Un cuadro oculto en otro de Van Gogh
Un ejemplo significativo, de entre los numerosos que proporcionó el conferenciante sobre la utilidad de la aplicación de las técnicas científicas al arte, es el de un cuadro de Van Gogh. “En 1886, Vincent escribió a su hermano Theo una carta en la que hablaba de que había pintado los torsos desnudos de dos luchadores, pero ¿dónde estaba esa obra? El análisis con rayos X de ‘Naturaleza muerta con flores de prado y rosas’ reveló que, debajo, se ocultaba el cuadro perdido y, además, se pudo atribuir al artista el lienzo con las flores”, indicó.
La grabación de esta primera conferencia del ciclo “Arte, Ciencia y Tecnología” está disponible para su consulta en el siguiente enlace del canal de YouTube de la UPNA: http://bit.ly/2PAuXsp
El ciclo de conferencias “Arte, Ciencia y Tecnología: miradas diferentes a una misma realidad”, organizado por el Vicerrectorado de Investigación y la Unidad de Cultura Científica (UCC) de la UPNA, en colaboración con el Museo de Navarra y con la financiación de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT) – Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, busca ofrecer una visión integrada de la creación artística y de la investigación científica. Las charlas, divulgativas y accesibles a todo el público, son impartidas por investigadores de reconocido prestigio.