Pierre Sané, Secretario General de Amnesty International, ha recogido en Pamplona el Premio Internacional Jaime Brunet pro Derechos Humanos 1998. Se trata de la primera ocasión en que se conce el premio, dotado con 6 millones de pesetas.
En su discurso, Pierre Sané ha denunciado la actitud de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, porque muy a menudo sus miembros obstaculizan la efectividad y credibilidad de la Comisión "al anteponer poderosos intereses políticos a su obligación de proteger y fomentar los derechos humanos". Asimismo, ha criticado la falta de coherencia y transparencia de la política exterior española a la hora de abordar los derechos humanos en relación con otros países.
Amnistía Internacional
Amnistía Internacional (Amnesty International, en inglés) es un movimiento global presente en más de 150 países y que trabaja para que los derechos humanos, reconocidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos aprobada en 1948 y en otros tratados internacionales como los Pactos Internacionales de Derechos Humanos, sean reconocidos y respetados. Amnistía cuenta con más de 3 millones de miembros y simpatizantes en todo el mundo.
El objetivo de la organización es "realizar labores de investigación y emprender acciones para impedir y poner fin a los abusos graves contra los derechos civiles, políticos, sociales, culturales y económicos" y pedir justicia para aquellos cuyos derechos han sido violados.
La Fundación y el Premio Jaime Brunet
La Fundación Jaime Brunet es una fundación cultural privada, cuyos fines son el fomento del respeto a la dignidad humana, a las libertades fundamentales y a los derechos humanos, así como la erradicación de situaciones y tratos inhumanos o degradantes. Entre otras actividades, convoca el premio Jaime Brunet Romero con el fin de distinguir un trabajo científico, literario o audiovisual o la trayectoria de una persona o institución que haya destacado en la promoción de los derechos humanos. En total, la fundación ha concedido desde 1998 veinte Premios Internacionales Jaime Brunet; el último, en 2017, a la Fundación Vicente Ferrer.
Jaime Brunet Romero (Bayona, Francia, 1926-San Sebastián, Guipúzcoa, 1992) nació en una familia de emprendedores catalanes que se había asentado en el siglo XVIII en Guipúzcoa (donde desarrollaron una importante actividad industrial). Educado con un talante liberal y crítico con la época que le tocó vivir, fue encaminado a la carrera de Derecho por su padre, Jaime Brunet Goitia, jefe local del Partido Republicano y que llegó a ser teniente de alcalde del Ayuntamiento de San Sebastián, donde ya habían ocupado la alcaldía su abuelo y bisabuelo. Cursó sus estudios en la Universidad de Valladolid, en la que ejerció como profesor ayudante.
Su afición destacada por la lectura se acompañó por el interés de aprender idiomas, con los que pudo desenvolverse con facilidad en sus numerosos viajes, que le llevaron, a pesar de las dificultades de su tiempo, a recorrer más de treinta países. En estos viajes, según confesaba, captó y comprendió cuánta discriminación y violencia, cuánto abuso de los poderosos sobre los débiles existen aún en nuestro siglo, y con qué facilidad se conculcan diariamente los derechos más elementales de la persona humana.
En los últimos años de su vida, su sensibilidad por la situación de los derechos humanos y la defensa de la libertad del ciudadano se convirtieron en su constante preocupación. Al no tener descendencia directa, y movido por sus sentimientos que le rebelaban contra las actuaciones injustas, decidió legar su fortuna para crear, a su fallecimiento, la fundación que, con su nombre, se dedicara a divulgar los derechos humanos y a premiar a quienes, por su trabajo en defensa de ellos, se hicieran merecedores de este reconocimiento. De este modo, se creó la Fundación Jaime Brunet Romero, con residencia en la Universidad Pública de Navarra, según su voluntad testamentaria.