Salta al contenido principal

La Universidad Pública de Navarra (UPNA) ha aprobado recientemente su primer Plan de Participación Estudiantil, que tiene por objetivo fomentar la participación activa del alumnado y que se ha concretado en un plan que contiene 75 acciones. La iniciativa, enmarcada en el Plan Estratégico de la UPNA 2020-2023, se ha llevado a cabo a través de un proceso participativo en el que se ha contado con las aportaciones de toda la comunidad universitaria y, en especial, del alumnado. Asimismo, se ha contado con la ayuda del Gobierno de Navarra y de la Fundación Caja Navarra.

La participación estudiantil, tal y como queda definida en el plan, engloba todas las actividades que se pueden desarrollar en la Universidad y que complementan la formación académica. Se agrupan en cuatro ámbitos: representación, gestión y evaluación institucional; docencia, investigación y formación complementaria, sociocultural y deportivo y, por último, cooperación y voluntariado. Con la elaboración del plan se plantean las siguientes metas: revisar la oferta actual de actividades, revisar los canales de comunicación para obtener una mayor difusión, definir nuevas acciones y crear un sistema de trabajo participativo entre alumnado y Universidad.  

zoom Estudiantes

Estudiantes, en la UPNA.

Entre las nuevas acciones recogidas en el documento se encuentran, por un lado, la de reforzar y dar a conocer la figura de los delegados y delegadas o la de impulsar las asociaciones estudiantiles. Por otro, se busca el fomentar el uso de lugares de encuentro, como un espacio “maker” en la Biblioteca, que pronto comenzará su andadura. Además, próximamente se pondrá a disposición del alumnado el “UPNA pass”, un documento que recogerá todas las actividades extra académicas en la que ha participado el o la estudiante en la Universidad y que servirá para completar su currículum.

Encuesta dirigida a 8.500 estudiantes

El I Plan de Participación Estudiantil de la UPNA se ha desarrollado en cuatro fases: las tres primeras, ya realizadas, fueron las de diagnóstico con grupos de interés, el cuestionario de recogida de aportaciones y la definición de las acciones. Por último, tendrá lugar la difusión y puesta en marcha. 

La encuesta de participación, abierta durante 3 semanas, se dirigió a 8.500 estudiantes a través de la plataforma “Mi Aulario”. Participó en ella un 15% del alumnado, el 60%, mujeres. En sus respuestas, los y las estudiantes indicaban que los factores que más limitan su participación son, sobre todo, la carga académica y la falta de información sobre las actividades. Entre los que la favorecen, citan el deseo de mejorar la formación personal, la búsqueda de realización personal y colectiva o el reconocimiento de créditos. Por sexo, los hombres echan más en falta las competiciones o desafíos en grupo y las mujeres, actividades de voluntariado. También hay algunas diferencias en lo referente a la antigüedad del alumnado, ya que el de último curso demanda en mayor proporción actividades que potencien la relación estudiante-profesorado (53%), frente a un 3% de estudiantes de primer curso que las echan en falta.

Actividades de participación en la Universidad

Entre las actividades de participación con las que ya cuenta la Universidad se pueden citar, en el ámbito de la representación, gestión y evaluación institucional; las elecciones a delegado o delegada, las elecciones en órganos de representación, la participación en el consejo de estudiantes o las encuestas para la evaluación de la satisfacción docente. Por su parte, el ámbito de docencia, investigación y formación complementaria engloba, entre otros, los programas de movilidad, los cursos y talles de empleabilidad, la mentoría sénior, las becas de colaboración, la participación en proyectos o los cursos de idiomas, emprendimiento o extensión universitaria. 

En el ámbito sociocultural y deportivo se pueden citar actividades como el teatro, coro, debate, actividades culturales y deportivas o asociaciones estudiantiles. En último lugar, el área de cooperación y voluntariado engloba los programas de mentoría (buddy o mentoría entre iguales) el proyecto Ruiseñor, las actividades de Universidad Saludable y de voluntariado y el programa de Formación Solidaria.