Un total de 918 estudiantes de 18 universidades de diez países de América, Europa y Asia se conectaron durante el segundo semestre del curso recién concluido 2019-2020 al laboratorio remoto de electrónica digital de la Universidad Pública de Navarra (UPNA), que desarrolló esta infraestructura para los grados en Ingeniería en Tecnologías de Telecomunicación e Ingeniería Biomédica. El alumnado se conecta por internet a un laboratorio real, situado en el campus de Arrosadia, en Pamplona, y aprende a diseñar prototipos electrónicos, como un reloj digital o un decodificador de señales de televisión, al acceder a dicho equipamiento mediante el envío de instrucciones.
Este laboratorio, impulsado por Cándido Aramburu Mayoz (profesor del Departamento de Ingeniería Eléctrica, Electrónica y de Comunicación) y desarrollado en colaboración con la empresa vasca EdTech LabsLand y la Universidad de Sao Paulo (Brasil), también sumó accesos más puntuales de otros 55 estudiantes de diecisiete países, por lo que la suma total asciende a 973 personas usuarias. En total, se han contabilizado 30.237 usos.
Clase de la asignatura Sistemas Digitales I de Ingeniería de Tecnologías de Telecomunicación e Ingeniería Biomédica, en la UPNA
En el millar casi de participantes, están incluidos también los 95 estudiantes de la asignatura Sistemas Digitales I, que se imparte en el segundo semestre de primer curso de dos grados de la UPNA (Ingeniería en Tecnologías de Telecomunicación e Ingeniería Biomédica) y cuyos responsables son los profesores Ignacio del Villar Fernández (en inglés), Marko Galarza Galarza (en euskera) y el ya citado Cándido Aramburu (en castellano). Dicha materia consiste en una introducción a la electrónica digital, por lo que, además de las clases teóricas, la docencia incluye prácticas en laboratorio con el fin de que el alumnado aprenda a realizar prototipos electrónicos, como un contador digital, un sumador o los ya citados con anterioridad. Para ello, los estudiantes aprenden a programar herramientas de software, denominadas EDA (siglas en inglés de Automatización de Diseño Electrónico), y a diseñar circuitos mediante lógica programable.
Las 918 personas que se han conectado con el laboratorio de la UPNA procedían de universidades de los siguientes diez países: Alemania, Brasil, Colombia, España, Estados Unidos, Holanda, India, Iraq, Jordania y Malasia. Entre los accesos puntuales, se contabilizan registros de lugares como Argentina, Australia, Ecuador, Gran Bretaña e Italia, entre otros.
Trabajar “online” como si fuera un laboratorio físico
Con el laboratorio remoto, el alumnado accede al mismo equipamiento que utilizaría en las instalaciones físicas y experimenta en tiempo real con él al poder ver cómo se comporta lo diseñado y programado al otro lado de internet. Las prácticas en laboratorio obligan a que cada estudiante cuente con estaciones de trabajo (ordenadores, tarjetas y placas electrónicas) e implican disponer de un tiempo limitado para realizar los ejercicios prácticos de manera presencial. Tal y como señala el profesor Aramburu, “con el laboratorio remoto para diseñar sistemas electrónicos mediante lógica programada, las barreras desaparecen”. “Los estudiantes se pueden conectar desde su casa, a cualquier hora, para trabajar en sus prototipos”, añade.
Esta iniciativa del laboratorio remoto de electrónica digital fue premiada en la última edición de la XVII Conferencia Internacional REV (Ingeniería Remota e Instrumentalización Virtual), celebrada a principios de este año en la Universidad de Georgia (Estados Unidos).