La Universidad Pública de Navarra ha aprobado, a través de su Consejo de Gobierno, la Estrategia de Cooperación al Desarrollo, que ha sido elaborada por el Vicerrectorado de Relaciones Internacionales y Cooperación y que tiene como objetivo continuar y mejorar el trabajo que ha venido desarrollando la Universidad en esta materia durante los diez últimos años. El documento define los ejes de actuación y los objetivos, analiza los recursos de que dispone y prioriza, en base a la experiencia y a la oportunidad, regiones del mundo y sectores hacia los que dirigir las acciones de cooperación universitaria que se desarrollan desde los campus de Pamplona y Tudela.
Con esta estrategia, la Universidad Pública de Navarra trata además de responder a los compromisos que derivan de su adhesión al Código de Conducta de las Universidades Españolas en materia de cooperación al desarrollo, y del propio despliegue del III Plan Estratégico 2011-14 de la Universidad, uno de cuyos objetivos, dentro del Eje de Internacionalización, es promover actividades de cooperación contemplando precisamente priorización de países y áreas de trabajo.
Según el documento, las áreas y líneas prioritarias de actuación serán, dentro del campo de la Salud, la salud comunitaria, la salud materno-infantil y la salud sexual y reproductiva. En el terreno de las Ciencias Jurídicas, Ciencias Humanas y Sociales y Economía, se priorizarán acciones de cooperación relacionadas con la diversidad cultural y la economía solidaria y el comercio justo; y en el sector de las Tecnologías para el Desarrollo, la cooperación universitaria se dirigirá preferentemente al uso de energías renovables, la producción, transformación y comercialización de productos agrarios, la soberanía y seguridad alimentaria, y las tecnologías de la información y la comunicación.
Prioridades regionales y coordinación
Por lo que se refiere a la distribución regional de las acciones, los países y pueblos prioritarios serán Bolivia, Ecuador y Perú, en América del Sur; El Salvador y Cuba, en América Central y el Caribe; Etiopía, Kenia, Mozambique, Uganda y Tanzania, en África; y los Territorios Palestinos, en Oriente Próximo. En este sentido, la estrategia señala que a la hora de establecer preferencias regionales es importante tener en consideración las prioridades de la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo (AECID), y los planes directores estatal y del Gobierno de Navarra, ya que de esta coordinación dependerá el éxito de la financiación.
Según se recoge en el documento, la financiación de las actividades de cooperación universitaria al desarrollo proviene de la Unión Europea (programas Eramus Mundos, Alfa, etcétera), del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación (becas de posgrado y doctorado), AECID (convocatoria abierta y programa de cooperación interuniversitaria), Gobierno de Navarra (convocatoria de asistencia técnica y financiación del programa Formación solidaria), y financiación propia.
Diez años de experiencia
La Universidad Pública de Navarra ha acumulado durante los últimos diez años diversas experiencias relacionadas con la cooperación al desarrollo que se han articulado a través de tres ejes: formación, asistencia técnica y sensibilización. Una de las acciones más exitosas ha sido el Programa de Formación Solidaria, que se ha tomado como referente en muchas ocasiones. Este programa ha permitido que un gran número de estudiantes haya realizado parte de su formación “sobre el terreno” en distintos países y ha abierto la puerta a profesorado de universidades del Sur para hacer estancias en el campus de Arrosadia. También ha dado la oportunidad al profesorado de la UPNA para entrar en contacto con otras realidades y problemas, lo que ha derivado en algunos casos en la ejecución de proyectos de investigación y de asistencia técnica.
Los instrumentos que existen en la actualidad en la UPNA para desarrollar actividades de cooperación son, dentro de la formación reglada, los trabajos de fin de carrera o grado y de fin de máster y practicum realizados “sobre el terreno”, asignaturas de libre elección (en los planes antiguos en extinción), asignaturas optativas (en grados) y acogida de estudiantes de países desfavorecidos mediante programas como Erasmus Mundus. Dentro de la formación no reglada, se organizan cursos y jornadas y se desarrollan también acciones de acogida de docentes y personal investigador a través del programa Formación Solidaria.
En el terreno de la investigación, la cooperación incluye la ejecución de proyectos en colaboración con universidades del Sur, la participación en redes, proyectos de formación y asistencia técnica. Por último, dentro del campo de la sensibilización, se realizan acciones de comunicación, sensibilización y educación para el desarrollo.