

El director de la ETSIA, Alberto Enrique (centro), presenta a Fermín Cilveti, junto a la subdirectora Cristina Arroqui
La innovación en la empresa no surge únicamente en el departamento de I+D, sino de la coordinación y aportación de todas sus áreas. Así lo aseguró el ingeniero agrónomo Fermín Cilveti Vidaurreta en una conferencia impartida recientemente a los estudiantes de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Agrónomos (ETSIA) de la Universidad Pública de Navarra y dedicada a la innovación en el sector agroalimentario.
Fermín Cilveti (Pamplona, 1975) participó en uno de los encuentros periódicos que la ETSIA organiza con profesionales e investigadores del sector agroalimentario y del medio rural para sus alumnos, que cursan o titulaciones de grado (Ingeniería Agroalimentaria y del Medio Rural e Innovación de Procesos y Productos Alimentarios) o de primer y segundo ciclo (Ingeniería Agronómica e Ingeniería Técnica Agrícola), estas últimas ya en extinción.
Fermín Cilveti, que se tituló como ingeniero agrónomo en la Universidad Pública de Navarra y es actualmente emprendedor en el sector agro-biotecnológico, señaló que “la innovación en las empresas, entendida como hacer las cosas de manera distinta a los competidores aportando valor añadido a los clientes, no sólo nace en el laboratorio y a través del conocimiento científico e investigador”. “La interacción con otras áreas de la empresa como la comercial, marketing, administración, financiera, logística, etc., que aportan su ‘know how’, retroalimenta el espíritu innovador –prosiguió-. De nada sirve desarrollar y producir un nuevo gran producto, a través del departamento de I+D y del de producción, si después esa empresa no es capaz de transmitir sus bondades, mediante del departamento de marketing, ni de comercializarlo adecuadamente a través del área comercial, ni de aportarle el capital financiero suficiente. Por tanto, la innovación debe involucrar a toda la organización si se quiere tener éxito”.
La experiencia en el sector lácteo
Fermín Cilveti ejemplificó su experiencia en innovación a través de una cooperativa navarra dedicada a la comercialización de leche y sus derivados, en la que trabajó durante siete años (entre 2005 y 2012) como director gerente. “Para diferenciar la leche de vaca UHT, considerada una ‘commodity’, tal como se definen aquellos productos básicos, genéricos y sin mayor diferenciación –explicó-, se puso en marcha un nuevo sistema de producción para posicionarla en una categoría diferenciada de mercado”.
Así, esta cooperativa fue “la primera empresa en España y de las primeras en Europa” en acogerse a la producción integrada de vacuno de leche, una alternativa innovadora respecto a la producción convencional y a la ecológica. La producción integrada utiliza prácticas compatibles con la protección y mejora del medio ambiente y los recursos naturales. En ella, “los métodos biológicos, culturales, químicos y demás técnicas son cuidadosamente elegidos y equilibrados, teniendo en cuenta el medio ambiente, la rentabilidad de las explotaciones y las exigencias sociales”, según la Organización Internacional de Lucha Biológica e Integrada (IOBC, por sus siglas en inglés).
Navarra, además, fue la primera comunidad autónoma en regular la producción integrada del subsector del vacuno de leche. El Instituto Navarro de Tecnologías e Infraestructuras Agroalimentarias (INTIA) es la entidad que controla, audita y certifica las explotaciones y la comercialización de la leche envasada.
Ocho horas entre recogida y envasado
Fermín Cilveti describió algunas de las innovaciones que aplicó en la cooperativa láctea, además de implantar una producción más sostenible con unas normas más exigentes de bienestar animal. “En la gestión ganadera, la alimentación del ganado se basa en fibra vegetal forrajera, producida, en su mayoría, en terrenos de las propias explotaciones; en la gestión veterinaria, se aumentan los periodos de supresión de tratamientos; en la gestión de la calidad, la trazabilidad de la leche está totalmente implantada y garantizada; en la gestión administrativa, el control de la recogida de la leche se realiza mediante PDA; en procesos, la media entre la recogida y el envasado del producto es de menos de ocho horas, se recogen muestras diarias de leche en todas las explotaciones con análisis posterior en laboratorio y existen tests rápidos de control de antibióticos para evitar su llegada al producto final; y en marketing, funciona un Centro de Interpretación de la Leche”, enumeró.
Toda esta cadena de procesos innovadores ha llevado a la firma navarra a recoger diversos reconocimientos, como, según recordó Fermín Cilveti, ser la primera leche de larga duración certificada en producción integrada del mercado nacional o lograr el Premio Sabor Superior en 2009, 2010, 2011 y 2012, concedido por el Instituto Internacional del Sabor y la Calidad de Bruselas, y el Premio Alimentos de España 2008 a la Producción Agraria, otorgado por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca.