La contaminación acústica de Pamplona en veinte años se ha reducido un 41% y la de Madrid, en un período de cinco años, un 17%. Estos son algunos de los resultados de los estudios sobre la evolución temporal de la contaminación acústica en ambas ciudades, realizados por el Grupo de Acústica del Departamento de Física de la Universidad Pública de Navarra y que han sido publicados por la prestigiosa revista de la Sociedad Americana de Acústica Journal of the Acoustical Society of America (JASA).
El artículo “¿Están disminuyendo los niveles de contaminación acústica en las zonas urbanas?” muestra los resultados sobre la evolución de la contaminación acústica en Pamplona y Madrid y concluye que, en ambos casos, ha disminuido con el paso del tiempo. La importancia de esta investigación, según señala el investigador responsable del grupo, Miguel Arana Burgui, radica en que se ha utilizado idéntica metodología durante los períodos temporales analizados, lo que permite concluir que los resultados son estadísticamente significativos. “Hasta ahora, se habían realizado estudios y mapas acústicos en muchas ciudades; el problema era que las metodologías no eran idénticas y no podían ofrecerse datos decisivos”.
Si bien es cierto que en las dos ciudades la contaminación sonora ha disminuido, no se puede decir en cuál ha descendido más, puesto que el período de tiempo analizado es diferente. Sin embargo, si se extrapola el plazo de cinco años (Madrid) a 20 años, la reducción sería mayor en esta ciudad.
En el caso de Pamplona, los mapas acústicos fueron realizados en los años 1988, 1998 y 2008 (a partir de 162 estaciones de medida) y han mostrado una disminución del ruido de prácticamente 2 decibelios para el conjunto de la ciudad. En Madrid (20 estaciones de medida), la disminución está en torno a 0,7 decibelios en el plazo de cinco años, de 1999 a 2003. En opinión del profesor Arana, dada la amplitud espacial y temporal de los datos recogidos, puede decirse que las disminuciones de ruido resultan totalmente significativas.
Contaminación y tráfico rodado
El tráfico rodado es la principal fuente de contaminación acústica en las ciudades. Del análisis de la relación entre los niveles de contaminación sonora y las variables de tráfico rodado, se concluyó que la reducción del nivel de ruido se debe, principalmente, a la menor emisión sonora de las fuentes móviles; es decir, a pesar del incremento de tráfico, ha disminuido la contaminación sonora. Un aspecto destacable del análisis de los datos (estudiando la evolución de los niveles percentiles asociados a los valores máximos emitidos) parece indicar una mayor educación de los conductores en sus hábitos de conducción y, aunque tales variables sólo se midieron en Pamplona, “es de suponer que ese aspecto sea extrapolable a otras ciudades”, señala Arana. En el caso de Pamplona, destacó también el descenso de contaminación acústica observado en uno de los distritos analizados y que fue consecuencia de la implementación de áreas peatonales.