cabecera abril 2014

Egresados/as por el mundo

Ricardo Trujillo Fernández, trabaja desde hace siete años en Forética, una organización con sede en Madrid que ayuda a las empresas a desarrollar estrategias de Responsabilidad Social y Sostenible. Actualmente se encuentra de excedencia en Houston (EEUU).

Ricardo Trujillo Fernández

“A pesar de la crisis, Madrid sigue teniendo más empresas donde empezar a buscar trabajo”

Su primera incursión laboral en el extranjero tuvo lugar en 2005, durante su época de estudiante. Era una de las opciones que tenían los alumnos de la primera promoción de LADE-Derecho, y Ricardo Trujillo Fernández lo tuvo claro. “Como era una carrera nueva y éramos muy pocos en clase, no podíamos ir de Erasmus, pero existía la posibilidad de tener una experiencia profesional fuera de España los últimos seis meses de la licenciatura, y yo elegí Dublín. Estuve trabajando en una organización vinculada al Ayuntamiento de Dublín, Dublin City DevelopmentBoard, que realizaba distintas actividades para la promoción y desarrollo de la ciudad”. Casi diez años después, Ricardo vuelve a trabajar en un país extranjero.

¿Por qué elegiste Houston?

A mi mujer le han trasladado a Houston y, como en principio es únicamente para un periodo de diez meses y a los dos nos apetecía mucho la experiencia de vivir en el extranjero, decidí pedir un permiso sin sueldo en Forética. Llevamos poco tiempo, desde marzo, y aunque sigo trabajando puntualmente para mi empresa con una propuesta para un proyecto con una organización vinculada a la sostenibilidad local denominada Green Door Houston, ya he empezado a buscar trabajo. Espero que no sea muy difícil porque la economía en Texas, y en Houston en particular, es de las más dinámicas de EEUU.

¿Te costó mucho trasladarte a Houston o era una oportunidad que no podías dejar escapar?

Era algo que queríamos hacer, así que lo buscamos. Tenemos la suerte de que mi mujer trabaja en una multinacional que ofrece este tipo de oportunidades. La verdad es que al principio Houston no nos parecía el mejor destino, pero ahora estamos encantados. Es realmente enriquecedor salir y vivir otras culturas, costumbres, maneras de vivir… Aprendes muchísimo y es muy positivo, tanto a nivel profesional como a nivel personal. Si se tiene la oportunidad de salir al extranjero, lo recomiendo al 100%.

Lleváis poco tiempo, pero ¿cómo es vuestra vida en Houston?

Aquí los trabajos son mucho más conciliadores con la vida personal. El horario laboral te permite salir pronto y disfrutar de tiempo libre, algo impensable en Madrid. Además de hacer las cosas de la casa (limpiar, cocinar, hacer la compra…), todavía nos da tiempo para practicar deporte y salir al cine o a tomar algo. Además, Houston tiene un sinfín de alternativas de ocio, desde partidos de la NBA y conciertos al aire libre, hasta museos con exposiciones increíbles. También hay mucha oferta de restaurantes. Dicen que Houston es una de las ciudades americanas donde más se sale a cenar, así que estamos conociendo y probando las distintas cocinas…

¿Te ha dado tiempo a conocer americanos o te relacionas únicamente con españoles?

Tenemos varios grupos con los que hacemos planes. Fundamentalmente, amigos de amigos españoles o compañeros de trabajo de mi mujer que son de distintos países. También hay un grupo muy grande de españoles que organizan reuniones por Facebook. Todavía no hemos ido a ninguna, pero ya habrá tiempo.

Aunque ahora estás en Houston, trabajas en Forética. ¿A qué se dedica tu empresa?

Es una organización que ayuda a empresas, ONGs y administraciones públicas a desarrollar y promover estrategias de Responsabilidad Social y Sostenibilidad. Es un campo que está creciendo muchísimo y que tiene mucho futuro. Además, tengo la suerte de que Forética es la organización líder en estos temas en España. Llevo prácticamente siete años en este mundillo y me sigue encantando.

Y ¿cómo fue tu adaptación?, ¿te resultó fácil vivir en Madrid?

El cambio es muy grande, sobre todo por las dimensiones de la ciudad. Mi hermana decía “en Madrid hay mucho de todo”, y es verdad. Una de las principales ventajas de trasladarse a Madrid es que hay muchísimas más oportunidades de trabajo que en Pamplona. Incluso ahora, en plena crisis, hay muchas más empresas donde empezar a buscar trabajo. También hay muchas oportunidades de formación con la que completar los estudios universitarios. Por otro lado, la oferta cultural y de ocio es enorme y viajar en avión desde Madrid a cualquier destino es más fácil y barato. En cuanto a los inconvenientes, quizá el más grande sea tener a la familia y a los amigos lejos, aunque en mi caso tengo varios amigos de la Universidad que viven en Madrid. Otro problema son las distancias. Como es una ciudad muy grande necesitas más tiempo para llegar a cualquier sitio. La mejor opción, el transporte público, que funcional genial.

 

 

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